Conseguir un arma en España es facil

y legal.

Muchos pensarán que se la puede alquilar al camello de turno, o comprársela a algún traficante. Pues no, estoy hablando de hacerlo legalmente. Otros pensarán: “bueno, pues vas al sur de Francia, muy tradicional en este sentido, y la compras”. Tampoco, no pasarías la frontera. “Pues te vas a algún país árabe o al norte de África y la compras, por cuatro duros, que incluso el viaje te sale bien de precio, luego la envías aquí por correo y ya está”. Hombre, es una buena opción, de hecho es la más utilizada, pero ilegal igualmente.

Tener un arma en España, de cualquier tipo, es ilegal y queda reservado a unos pocos, a una minoría. Y aunque parezca paradójico, los soldados de tropa y marinería ni siquiera tienen licencia. Sí, están autorizados a usarlas y llevarlas al estar trabajando, pero se limita a la vida laboral, y con muchas restricciones, y no pueden poseerlas.

Las licencias para adquirir un arma quedan circunscritas a policías, guardias civiles y oficiales de los tres ejércitos (me parece que a partir de cabo primero ya se puede obtener una licencia, no estoy seguro).

Pero pasemos al tema en cuestión. Somos civiles. Siempre nos queda la opción de estar amenazado seriamente de muerte, pero creo que a nadie le apetece estarlo… con esto te darían una licencia “B”, para poseer un arma corta.

La otra opción es federarse (40€) en la federación de tiro deportivo de tu provincia, hacer los cursos (desde 100€ en algunas comunidades hasta 400€ en Madrid), pasar un examen psicofísico (sencillísimo) (tasas nimias) y las tasas de la expedición de la licencia. Luego vas a la armería y te compras un arma adecuada a una licencia “F”.

Resumen: por algo menos de 800 euros (arma incluida), tienes en tus manos una pistola. Fácil, sencillo, y para toda la familia.

[Ojo, con este artículo no pretendo fomentar conductas antijurídicas o que incurran en delito alguno, trato de plasmar la realidad]

Para los poco puestos en el tema: esta licencia tiene muchas limitaciones, tanto en lo relativo a la posesión, transporte y utilización, como a los trámites de licencia, registros periódicos, etc etc.